miércoles, 11 de abril de 2012

Experiencias Galán: Concurso


  ¡Que emoción mi primer concurso!

  Debido a que cada vez tengo mas visitas y que me leen incluso al otro lado del charco (un abrazo para todos mis lectores latinoamericanos) he decidido hacer este blog un poco mas interactivo con este pequeño concurso.

  Así que aquí va: será un concurso que recoja vuestras historias, que deberán encajar en el apartado Experiencias Galán, se puntuará, la redacción, la originalidad y bastante que sea una historia divertida. Pero por encima de todo, ya que esto es un blog dedicado a la mejora personal se tendrá en cuenta que sea una historia útil, con una moraleja que nos ayude a los demás a crecer.

Tendrán que ser historias máximo de 600 palabras (una cara y media mas o menos tampoco lo voy a mirar con lupa) y tendréis hasta el día 15/05/2012 para mandarlas.

  El ganador o la ganadora ( Habéis oido bien chicas, ¡vuestras historias también valen!) verá colgada su historia en mi blog y además recibirá un detallito de mi parte. Así que podéis mandar vuestras historias a partir de este momento a Victorgalanseduccion@gmail.com
Si no queréis que publique vuestro nombre mencionadlo en el correo.

  ¡Que gane el mejor!
                                                                                                                                       V.


Filosofia del seductor- Karma: Cuando la vida regala



  Estoy acostumbrado a ganar... mas concretamente, a ganármelas, no estaba preparado para lo que me paso hace un mes escaso. Por eso me sorprendió y os puedo sacar un poquito de filosofía mañanera que no viene mal.

  Estaba en la habitación de mi hotel (había salido de Madrid por trabajo) tirado en mi cama cuando de repente me vibra el móvil, era el whatsap y la que me hablaba era M, pensé que era raro, puesto que nunca me había hablado antes por aquí...

  M era una chica que había conocido hace poco en un curso, bastante mayor que yo y muy atractiva, solo habíamos tenido contacto cuando decidimos salir de fiesta toda la clase, allí jugué mis cartas bastante bien pero no recibí mucha respuesta, así que, siendo congruente con mi personalidad decidí retirarle la atención y seguir a mis cosas.

   Ahí estaba yo, medio desnudo en mi hotel, con el teléfono en la mano y pensando en que le estaría pasando por la cabeza a esta chica para hablar conmigo.

  Empece a hablar con ella, iban a organizar otra fiesta y querían invitarme, a lo que le contesté que no podía puesto que estaba fuera de Madrid, entonces, sin yo hacer nada, ella se empezó a abrír a mi, a contarme sus problemas, sus aficiones y...¡en menos de 20 minutos ya habíamos quedado en mi casa para cuando volviera de viaje¡

  ¿Sabéis lo que sentí en ese momento?

  Decepción.

  No era posible, no era ni siquiera justo, después de todo el trabajo que había invertido en convertirme en un AVEN (artista venusiano para los que andáis un poco perdidos), de repente me encontraba en un mundo donde parecía que las mujeres estaban en oferta, y para ligar no necesitaba mas que estar en el sofá. Esa mujer, con la que antes solo podía soñar, ahora se tiraba a mis pies sin yo hacer ningún esfuerzo aparente y esa “lucha” de la que había llegado a disfrutar ya no existía. Era como si justo después de graduarte en medicina inventan la panacea, que te deja un sabor agridulce...


  Así que la vida me regala una chica ¿no?, vale, perfecto, me la quedo.  Aunque esté un poco decepcionado. Pero después de reflexionar un rato, pienso, ¿realmente ha sido un regalo?


  La respuesta es un rotundo NO, ¿Cuanto tiempo he pasado haciéndome a mi mismo? He pasado innumerable horas aprendiendo a bailar, leyéndome los libros de Mario Luna, memorizando abridores, buscando información por Internet, he trabajado mi juego interno, sargeado con chicas, viajado por el mundo y yendo a talleres de seducción... ¿y todavía digo que no he hecho nada?

  Nadie regala nada, esta chica con la que tuve un breve, pero intenso, romance, me la había “ganado” yo. Quizá no tuve que realizar malabares, no tuve que deslumbrarla con mi labia, pero le gusté por ser la persona en la que me había convertido gracias a mi esfuerzo, nada mas.

  Y es que la vida, si te portas bien, si mantienes la actitud correcta, además de palos también te da alguna que otra golosina que te motiva para seguir adelante. Mantened vuestra actitud de ganador tened claro vuestro camino y os pasaran cosas buenas, así por lo menos es como entiendo yo mi particular rueda del Karma ( al mas puro estilo de “ Me llamo Earl”)


  Tanta filosofía me agota pero espero abrirme un huequecito en vuestras mentes y que os sirva para algo, un abrazo.
                                                                                                                                            V.